Desde hoy 18 de mayo y hasta el día 24, la Dirección General de Tráfico (DGT) llevará a cabo una campaña para la seguridad vial centrada en los neumáticos y las luces. La Policía Local y la Guardia Civil comprobarán, sobre todo, que…
Desde hoy 18 de mayo y hasta el día 24, la Dirección General de Tráfico (DGT) llevará a cabo una campaña para la seguridad vial centrada en los neumáticos y las luces. La Policía Local y la Guardia Civil comprobarán, sobre todo, que la salud de los neumáticos es la correcta. Si no fuese así, la multa podría llegar a los 200 euros.
Con esta campaña, la Dirección General de Tráfico pretende concienciar a los conductores de la importancia de mantener el vehículo en buen estado como parte de lo que se conoce como “seguridad activa”. La seguridad activa es el conjunto de todos aquellos elementos del vehículo que tienen como finalidad reducir el número de accidentes (luces, frenos, neumáticos, etcétera). La seguridad pasiva, por su parte, tiene la finalidad de reducir la gravedad del accidente cuando este se produce (cinturón, apoyacabezas, airbag, etcétera).
Mantener los neumáticos y las luces en buen estado
La mala situación de los neumáticos es la principal causa de accidentes por fallos mecánicos, por lo que su mantenimiento debe ser prioritario. Las ranuras de drenaje —lo que se conoce como “dibujo” de los neumáticos— no pueden estar gastadas, ya que de ellas depende en gran parte la adherencia del vehículo al asfalto. La profundidad mínima que tiene que presentar el dibujo no puede ser inferior a 1,6 milímetros.
Los neumáticos no solo deben cambiarse en este caso, sino también cuando presenten cortes profundos independientemente del dibujo. Deben ser sustituido también cuando tenga deformaciones o cada cinco años, aunque no se haya usado el vehículo.
En cuanto a las luces, tienen que estar limpias, bien regladas y, sobre todo, en funcionamiento, ya que circular con una luz fundida puede ser motivo de multa. De hecho, es obligatorio llevar un juego de lámparas de repuesto por si alguna se avería. Lo mejor para mantener la buena salud de las luces es reglarlas, al menos, una vez al mes en intensidad y altura.